Pretendía hacer un jabón blanco como la nieve y me ha salido un jabón de lo más vintage gracias al craquelado producido por el proceso de gelificación que atraviesa el proceso de saponificación combinado con el pigmento blanco utilizado, en este caso dióxido de titanio o rutilo
Al llevarlo a la nariz parece como un dulce recuerdo con la maravillosa fragancia de Musgo Blanco,combinada con la cítrica y auténtica Litsea Cubeba y el potente Árbol de Té.
Entre sus aceites más destacados encontramos el aceite de Caléndula y el de Rosa Mosqueta Vírgen de primera presión en frío, para renovar y regenerar la piel.
Contiene activos naturales despigmentantes como el Aloe Vera, Infusión de Perejil y Manzanilla, Extracto de Regaliz y Extracto de Pepino.Acción reforzada por la Arcilla Blanca y el Polvo de Madreperla complementan este jabón que destaca además por la suavidad aterciopelada que le confiere la seda vírgen.
Un lujo sobre las pieles pigmentadas que ganarán en luminosidad,clarificando la expresión
